Recientemente el Instituyo de Biomecánica de Valencia (www.ibv.org), publicaba en su revista de Biomecánica, los resultados del estudio y trabajo técnico desarrollado con la colaboración, entre otros, de TUZSA.
El proyecto SAFEBUS, cuyo objetivo era realizar un estudio pormenorizado de la situación y condiciones de seguridad a bordo para luego proponer un sistema integral más seguro y orientado al usuario.
El transporte público en autobús urbano está pensado, de manera general, como una sucesión de paradas en las cuales los viajeros suben y bajan del vehículo en función de de su destino y dónde los usuarios pueden viajar de pie o sentados. Se trata de intentar evitar o reducir al máximo los accidentes producidos en el interior o en el entorno de los autobuses urbanos así como sus lesiones asociadas.
El proyecto se ha enfocado de manera directa a tratar de conseguir mediante el desarrollo de nuevos avances tencnológicos y soluciones ergonómicas, una mejora en la calidad de la vida de las personas.
Las conclusiones para Zaragoza son claras. La frecuencia de incidentes en la red metropolitana es muy baja y éstos están ocasionados en su mayoría por aceleraciones o frenadas bruscas del bus en circunstancias sobrevenidas e imprevisibles. Los incidentes registrados, tanto en interior como en exterior han sido muy leves y en nigún caso ha habido lesiones o heridas importantes.
Todas las conclusiones del estudio culminarán en la integración de los diferentes sistemas de seguridad en un autobús de pruebas de Castrosua.
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